¿Puede un banco central tener injerencia en algo que es, en esencia, descentralizado? Al menos esa es la intención de la autoridad monetaria local, tal como lo adelantó esta semana su presidente. Miguel Pesce declaró públicamente que el BCRA busca controlar la intersección de las criptomonedas con el sistema de pagos y el mercado cambiario. Sin dar demasiado detalle, el funcionario disparó un debate en la comunidad que sigue el Bitcoin y otros activos de esta especie de cerca respecto de hasta dónde puede llegar esa regulación.
El Banco Central (BCRA) viene haciendo un trabajo de seguimiento en el mundo cripto. Por un lado, en junio de este año dio comienzo a una inspección sobre un grupo de nueve fintech que operan con criptomonedas para determinar si están o no realizando intermediación financiera, algo que corresponde a los bancos. En este caso, está analizando casos como las compañías que prometen remunerar los depósitos captados (al estilo “dejá tus cripto acá y te damos rendimiento”).
Por el otro, la entidad puso la lupa sobre aquellas operaciones que permiten saltear el cepo al dólar, en las que se compra un criptoactivo en pesos y se lo vende contra dólares, muchas que ya están monitoreadas por la Comisión Nacional de Valores (CNV), que regula la actividad bursátil, y la Unidad de Información Financiera (UIF), que previene el lavado de dinero.
odavía no hay nada en carpeta más allá del anuncio de Pesce, que fue más una declaración de intenciones que una propuesta concreta. TN.com.ar consultó a abogados cambiarios y especialistas del mundo cripto para entender hasta dónde puede llegar la regulación de la autoridad en un mundo donde cuantas menos normas haya, mejor.
“Un banco central tiene la potestad de definir a las criptomonedas y después ver si pueden ser un instrumento de pago, y entonces vincularlas a las distintas instituciones que la autoridad monetaria regula y así acortar márgenes de acción y de interacción para estos instrumentos”, explica Ignacio Carballo, director del Ecosistema Fintech & Digital Banking de la Universidad Católica Argentina (UCA).
“Es posible que el BCRA pretenda restringir a las entidades financieras, procesadoras de pagos, emisoras de tarjetas de crédito y prepagas respecto a las operaciones de compraventa de criptoactivos que efectúen los clientes”, advierte, por su parte Estanislao Díaz Saubidet, del estudio Márquez Smith.
“Podría establecer un régimen informativo a fin de que esas entidades provean información al BCRA respecto a las operaciones de compraventa de criptoactivos efectuadas por o a través de los ‘brokers’. De hecho, el BCRA ya solicitó a las entidades financieras (a través de las asociaciones de bancos) que informen acerca de las empresas que realizan operaciones de criptoactivos”, señala el especialista.
Por último, también está en “veremos” la exportación de servicios: para evitar liquidar los dólares en el mercado único y libre de cambios, donde las personas reciben hasta $80 menos por dólar de lo que podrían recibir en otros mercados, muchas personas eligen cobrar en criptoactivos y dejar ese dinero afuera.
En ese sentido, Díaz Saubidet apunta que el BCRA “ya reguló las criptomonedas” en la Comunicación A 7030 emitida en mayo de 2020, en la que “dispuso que las emisoras de tarjetas debían obtener la previa conformidad del BCRA para realizar pagos al exterior en relación a la adquisición de criptoactivos”. (TN)

