El Gobierno logró “patear” para adelante por entre un año y hasta dos el 64% de los compromisos de deuda que enfrentaba en los próximos tres meses y medio al concretar un nuevo canje de deuda en pesos.
De esta manera reconvirtió un calendario de pagos que se empinaba hasta los $7,5 billones en ese lapso en otro más desahogado que contempla compromisos por un piso de $3,16 billones, aunque esa cifra se irá acrecentando por las nuevas colocaciones que realice de aquí en adelante hasta fin de junio.
Los vencimientos del año estaban concentrados en un 48% en el segundo trimestre (54% incluyendo marzo). Tras la conversión pactada hoy se redistribuyeron quedando un 33% en lo que queda del primer semestre y 67% en el segundo “y con mayor participación del sector público)”,destacaron desde Economía. Además para los de 2024 quedó el 32% en el primer trimestre, el 21% en el segundo, el 14% en el tercero y 33% para el último trimestre, destacaron.
El Tesoro Nacional debía afrontar vencimientos por $ 0,8 billones en marzo, $ 2,5 billones en abril, $ 2,1 billones mayo y $2,5 en el mes de junio. “Luego de esta operación de conversión, los vencimientos proyectados quedaron en $0,6 billones, $1,0 billones, $ 0,9 billones y $ 0,8 billones, respectivamente”, según indicaron.