A partir de mediados de 2025, los ciudadanos no pertenecientes a la Unión Europea (UE) que deseen viajar o transitar por cualquiera de los países del bloque deberán pagar una nueva tasa de 7 euros (7,50 dólares). Esta medida forma parte del European Travel Information and Authorisation System (ETIAS), un nuevo sistema que busca mejorar la seguridad en las fronteras y el control migratorio en el espacio europeo.
El ETIAS no es una visa, sino una autorización previa de viaje que permitirá a las autoridades europeas llevar un registro detallado de los visitantes antes de su llegada, con el objetivo de identificar posibles riesgos de seguridad o migración. Esta autorización será obligatoria para ciudadanos de más de 60 países.
:quality(85)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/infobae/G2TPZRWKFPKSZ54LHQC7HAQPD4.jpg 420w)
El nuevo impuesto afectará a los viajeros de entre 18 y 70 años que no pertenezcan a la Unión Europea. Este rango de edad ha sido establecido para centrarse en personas que, estadísticamente, tienen más probabilidades de viajar por turismo o negocios.
La implementación del ETIAS representará un cambio significativo, especialmente para los ciudadanos de países fuera del bloque europeo, quienes antes disfrutaban de acceso libre a la UE para estancias cortas.
:quality(85)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/infobae/4AFRGY22KBCIHKSK3L4IBVUYJU.jpg 420w)
Los británicos, que solían tener libertad de movimiento en la UE antes del Brexit, ahora deberán cumplir con este nuevo requisito. Esta es solo una de las consecuencias del Brexit que ha impactado la movilidad de los ciudadanos del Reino Unido.
Proceso de solicitud del ETIAS
El proceso para obtener la autorización del ETIAS se realizará completamente en línea. Los solicitantes deberán proporcionar información básica personal y de viaje, además de responder a preguntas relacionadas con su salud, antecedentes criminales y cualquier rechazo previo de entrada a otro país.
Es importante destacar que la tasa de 7 euros no necesitará pagarse cada vez que se entre a un país de la UE, ya que la autorización tendrá una validez de tres años o hasta que el solicitante obtenga un nuevo pasaporte.
Los viajeros deberán solicitar la exención al menos 96 horas antes de su partida hacia cualquier destino en la Unión Europea, lo que permitirá a las autoridades realizar los controles necesarios de manera anticipada.