Transcurrieron 507 días desde que su rostro se replicó en todas las pantallas televisivas. Un año, cuatro meses y 16 días desde aquel mediodía del 25 de marzo de 2020 en que los portales de noticias relataban cómo Federico Llamas, un joven de 27 años, circulaba por la autopista Panamericana con bolsos y tablas de surf en el techo de su camioneta, a pocos días de que el presidente Alberto Fernández decretara el aislamiento social, preventivo y obligatorio en todo el país.
Durante aquella jornada, Llamas acaparó la atención pública nacional por el desconcierto y la novedad que generaba su caso, el que empezó cuando los efectivos de Prefectura Naval Argentina (PNA) lo detuvieron en la localidad de Martínez. El joven explicó que se había ido de vacaciones a Brasil a principios de marzo y que regresaba al país a través de la frontera de Paso de los Libres, para ir finalmente rumbo a su domicilio.
el hombre que actualmente tiene 29 años le concedió una entrevista a TN.com.ar y decidió romper el silencio. “No me sorprende para nada viniendo del gobierno que tenemos. No le acredito toda la culpa al Presidente, porque hay un montón de gente detrás de eso, pero él es el que da la cara. Es vergonzoso que un presidente, abogado, haga este tipo de cosas. Y no es que intento decir ‘uh, mirá lo que me hicieron y mirá lo que está haciendo el Presidente’, porque yo no hice nada, lo único que quería era volver a mi casa”, dijo.
Llamas es electricista y actualmente está radicado en Ostende, municipio de Pinamar, en donde realiza trabajos autónomos en diversos barrios. Fue allí justamente en donde se refugió aquel día, en la ciudad balnearia donde también vive su madre. “Los policías no estaban informados de cuál era el protocolo que tenían que seguir respecto a la documentación, no sabían que la declaración jurada no era física y sí una foto que te hacían presentar en la frontera. Cada uno tomó una decisión y entre todos creyeron que era correcta”, argumentó.(TN)

