Entrada la madrugada y casi sobre el final de una maratónica sesión en el Congreso, la Cámara de Diputados le dio medio sanción al proyecto que busca cambiar el huso horario de la Argentina cuatro horas al oeste de Greenwich durante el período invernal. La votación se cerró con 151 votos afirmativos, 66 negativos y 8 abstenciones y fue elevada al Senado.
Se trata de la iniciativa que el exvicepresidente Cobos y legislador de la UCR, Julio Cobos, presentó en más de una oportunidad ante la cámara Baja. Esta misma busca modificar el huso horario del país bajo el argumento de que existe un desfasaje significativo entre la hora que marcan los relojes y la hora solar real, lo cual genera diversos inconvenientes para la población, entre ellos el consumo eléctrico.
El texto de la ley le otorga la potestad al Poder Ejecutivo de modificar la hora al huso -3, el actual, durante el período estival si lo considera necesario, mientras que en invierno se llevaría hasta el -4. Esto permitiría mantener una suerte de horario de verano. Cobos sostiene que la Argentina posee una de las mayores diferencias entre la hora oficial y la solar.
En la actualidad, la Argentina se rige por el huso horario -3. Geográficamente, la mayor parte del territorio nacional se encuentra dentro de la franja correspondiente al huso -4. Solo la zona cordillerana ingresa en el huso -5. Esta diferencia es la que el legislador mendocino define como un problema. “La Argentina tiene un desfasaje entre la hora oficial (-3) y el huso horario que realmente nos corresponde (-4), y esto provoca varios inconvenientes”, sostuvo Cobos.
Cada Estado tiene la capacidad de definir su propia hora oficial. No existe un tratado internacional que obligue a los países a adoptar un huso particular. La mayoría elige su hora a partir del Tiempo Universal Coordinado (UTC) para mantener una armonía global.