El Gobierno de la Ciudad ahora redobló la apuesta y presentó al ministro de educación Nicolás Trotta un nuevo plan que consiste en que esos alumnos tengan clases presenciales en espacios públicos abiertos, más concretamente en las plazas. La idea es que sea una plaza por barrio y a partir del 28 de septiembre.
Pero además, el proyecto no apunta sólo a esos chicos sino que contempla también un espacio para los alumnos de primer grado (en las mismas plazas), otro para los que están terminando la secundaria -en las calles, con los mobiliarios de la escuela, pero sin interrumpir el tránsito- y, finalmente, un espacio para los estudiantes de nivel superior y formación profesional que necesiten rendir exámenes para recibirse y aspirar a un trabajo.
(Clarin)