Gran parte del área metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y varias provincias del país se quedaron sin luz este miércoles por la tarde, debido a un incendio ocurrido en unos pastizales que afectaron tres líneas de transmisión de alta tensión en la zona del Litoral, minutos antes de las 16. Este incidente, a su vez, sacó de servicio (”desenganchó”) a la central nuclear Atucha I, según confirmaron fuentes oficiales, que generó un desbalance entre la demanda y oferta eléctrica del sistema argentino de interconexión (SADI).
Alrededor del 40% de la demanda eléctrica total del país quedó sin luz, lo que equivale a más de seis millones de hogares o a 20 millones de personas. Por la noche, el ministro de Economía, Sergio Massa, pidió a la Justicia investigar el incendio “sobre las islas del delta del Río Paraná”, pese a que el incidente se generó a ocho kilómetros de General Rodríguez.
A las 22, todavía había amplias zonas sin luz. El apagón provocó, en un día de intenso calor, el colapso del transporte, la parálisis de plantas productivas y la pérdida de mercadería en hogares y comercios. También afectó la provisión de agua.