El bailarín reconoció que los hechos de inseguridad que vivió en los últimos años ayudaron en su decisión de irse del país.
Piquín reconoció que los dos hechos de inseguridad que vivió (el primero en 2017, cuando su auto recibió casi una docena de balazos al ingresar al country donde tiene una casa, tras retirarse a la madrugada de ShowMatch; y el segundo este año, cuando le robaron 20.000 dólares y joyas familiares en una salidera bancaria) también influyeron en este cambio de vida: «Eso me dio un empujón fuerte. Lo que pasó fue muy fuerte. Que te tiren 14 tiros y que ninguno te haya dado, fue fuerte».
«Es el día de hoy que no puedo dormir. Duermo cuando estoy de gira, porque estoy en un hotel y tranquilo. Cuando estoy en mi casa no puedo dormir, aunque me haya mudado. Llego a la noche a casa, estoy atento a todo y es feo. Pero nada, es la vida misma. Los voy a extrañar», cerró, a corazón abierto.