La princesa del Pop fue fotografiada junto a su novio, Sam Asghari, en Miami y acusó a los paparazzi de editar las imágenes para perjudicarla.
Britney Spears ha acusado a los paparazzi de editar fotos suyas al natural para hacer que parezca más «gorda». El enojo y descargo de la «Princesa del Pop» en las redes sociales se dio luego de que salieran a la luz unas fotografías de ella con su novio, el modelo Sam Asghari, disfrutando de las playas de Miami durante el fin de semana.
En plena recuperación por una fuerte depresión que la llevó a internarse por un mes en un clínica psiquiátrica y suspender sus shows en Las Vegas, la cantante de 37 años acusó a los fotógrafos de querer perjudicarla vendiendo una imagen de su físico que no es real.