Un mini submarino capaz de descender a 6.000 metros bajo la superficie se sumó a las tareas junto a varias embarcaciones que rastrean el área. Al borde del tiempo estimado de supervivencia, sólo se espera un milagro para los cinco tripulantes.
Los guardacostas estadounidenses se mantienen “optimistas”, pero la situación se vuelve cada vez más complicada para los pasajeros del pequeño sumergible de aguas profundas de la empresa privada OceanGate Expeditions, con oxígeno de emergencia.