Luego de semanas llenas de preocupación y angustia, Thiago Medina finalmente dejó el Hospital Mariano y Luciano de la Vega, en Moreno, donde pasó casi un mes internado tras el grave accidente de moto ocurrido el pasado viernes 12 de septiembre en esa misma localidad. El joven de 22 años debió atravesar complicaciones y varias intervenciones, pero logró una evolución médica que, este jueves, le permitió dejar atrás la terapia y salir por las puertas principales del establecimiento de salud.

El clima en la entrada del hospital era una mezcla de aplausos, cánticos de aliento, celulares grabando y flashes incesantes. Acompañado por su familia, Thiago intentó recomponerse y, con la ayuda de su hermana Camila Deniz, buscó un espacio para ponerse de pie y saludar con una sonrisa. “Ya está, me estoy yendo a casa. Soy libre”, le aseguró a los periodistas que se acercaron a preguntarle por su estado de ánimo a pocos minutos de recibir el alta.


En sus primeras palabras, Thiago reveló el apuro y las ganas por volver a las cosas más simples y valiosas. “Cuando me desperté lo primero que pensé fue en tomar el agua y cuando recibí el alta, en ver a mis hijas”, confesó con honestidad, dejando ver el costado más humano y paternal del joven que, durante semanas, luchó por volver a abrazar a su familia.
Consultado sobre los cambios que siente después de todo lo que vivió, Thiago fue claro: “Muchas cosas, te cambia la manera de pensar, de disfrutar la vida”, aseguró, resaltando lo transformador de haber pasado por una situación tan límite. También se refirió a los rumores que circularon sobre una supuesta propuesta de matrimonio a su expareja y madre de sus hijas, Daniela Celis. “No, nunca lo dije. Si se da más adelante, se va a ver en las redes. Pero bueno, estamos acá”, aclaró, sin descartar del todo un futuro posible, pero dejando el tema en pausa y emitiendo calma.