La exclusión de Huawei, cuyo material se ha utilizado desde hace años en el desarrollo de las redes 3G y 4G británicas, se hará de forma progresiva.
A partir del 31 de diciembre estará prohibido que los operadores de telecomunicaciones compren nuevos equipamientos 5G al grupo chino. Después, tendrán hasta finales de 2027 para retirar todo el material antiguo de Huawei de sus redes, precisó Dowden.
El ministro justificó esta decisión por la “incertidumbre” que causan las sanciones anunciadas en mayo contra Huawei por Washington.
El presidente Donald Trump acusa al grupo tecnológico chino de ser un espía de Pekín, lo que la compañía niega, y para cortarle el camino está decidido a impedirle el acceso a los semiconductores fabricados con componentes estadounidenses.
Para el gobierno británico que Huawei recurra a materiales de reemplazo puedan plantear riesgos de seguridad que no contemplaban hasta ahora.