En el documento, la central fabril advirtió que la pandemia dejará fuertes secuelas a nivel global y local, en «un contexto internacional inédito con una recesión comparable a la que se produjo con la Segunda Guerra Mundial» y un proceso global «de importantes transformaciones en los modos de producción y consumo, con una pronunciada aceleración en los procesos de automatización y digitalización de las economías».
«Es urgente consolidar una estrategia macroeconómica integral que tenga como objetivo central la agregación de valor, la generación de divisas y la creación de empleo», expresó la UIA.
Esto requiere «una política monetaria que fomente el ahorro en moneda local y busque gradualmente salir de los controles y regulaciones cambiarias, una política cambiaria previsible que sustente la agregación de valor en la producción, una política tributaria que promueva la inversión y el empleo con políticas e incentivos focalizados.
Además planteó la necesidad de «una política de ingresos que reduzca la nominalidad de la economía y establezca precios relativos estables que brinden mayor previsibilidad para todos los sectores» y por sobre todo estos ejes » alcanzar un acuerdo favorable con los acreedores de deuda, fundamental para la estabilidad macro y la reducción de las tasas de financiamiento».
En relación a las políticas productivas, señalaron que mientras persista la fuerte caída de las ventas, «harán falta medidas para sostener la producción y será clave mantener y ampliar las medidas fiscales y monetarias anunciadas, brindar incentivos para sostener las exportaciones y aliviar la presión impositiva del sector productivo». (Télam)