La Corte Suprema de Justicia de la Nación confirmó ayer la condena a cuatro años de prisión al ex ministro de Planificación Julio De Vido por su responsabilidad en la tragedia ferroviaria de Once, ocurrida en febrero de 2012, un hecho que produjo la muerte de 52 víctimas. En el expediente, De Vido fue absuelto del delito de estrago culposo, pero fue condenado por administración fraudulenta.
Así, el máximo tribunal, integrado por los jueces Ricardo Lorenzetti, Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz, abrió la chance de que De Vido sea detenido y regrese a la cárcel; ya había estado preso en el penal de Marcos Paz en 2017 por la causa Rio Turbio. Horas más tarde, el Tribunal Federal N°4, que emitió la condena, firmó el pedido de captura. Dada la edad de De Vido -75 años- es altamente probable que reciba el beneficio de la prisión domiciliaria.
Su histórica defensa, encabezada por los abogados Maximiliano Rusconi y Gabriel Palmeiro, se comprometió a presentar a De Vido mañana jueves a las 10 AM en Comodoro Py. En todo caso, podría ocurrir un conflicto de agendas; mañana se esperaba que De Vido se conecte vía Zoom a la segunda audiencia del juicio de los cuadernos de las coimas, donde el Tribunal Federal N°7 lo acusa de ser el organizador de una asociación ilícita liderada por Cristina Kirchner, dedicada a la recolección de sobornos de grandes empresarios para aceitar la máquina de la obra pública.
De cara a la confirmación de la Corte -que desestimó el último recurso de Rusconi, que pedía revisar el monto de pena de cuatro años fijado por la Sala III de la Cámara Federal en el caso Once-, el abogado emitió una serie de declaraciones con duras críticas al fallo de la Corte, al que calificó “una nueva decisión arbitraria y violatoria de los derechos humanos fundamentales”.

